Amor propio y colectivo del 35 de Vélez que se hizo dueño, una vez más, del mediocampo para darle tranquilidad al equipo de Mauricio Pellegrino
Partidazo de Santy. Entiende a la perfección como se juega la Copa Libertadores, pese a que sea su primera participación. Desde el amor propio para ir al piso, barrer, hacerse dueño del mediocampo hasta en lo futbolístico donde siempre, ni bien recibe el pase, se perfila hacia adelante.
La poca seguridad que brinda Galdames, sumado a los repetidos errores o falencias de Janson y Ortega, hicieron que Santy se destacara. Le salvó las papas a Vélez constantemente. Y ahí está el tema, porque como dijimos en el párrafo anterior, es un jugador que le puede brindar mucho juego a Vélez con su paso por Europa y por América, el club más grande de México. No es coincidencia que Gonzalo Castellani haya terminado expulsado, porque desde que comenzó el partido tuvo un duelo con el 35 que lo controló perfectamente.
Personalmente, creo que necesita un compañero que lo asista así no hace el trabajo sucio únicamente él. Es el tercer partido consecutivo que lo amonestan antes de que termine el PT -se pierde el próximo- y a su vez, se le nota su fatiga en el ST por todo lo que dió en los primeros 45 minutos. Tal es así, que salió reemplazado en camilla por un calambre a los 85 minutos por Agustín Mulet.
Ramiro Boz
@ramiroboz